Los operadores que se ocupan del tratamiento de superficies deben afrontar cada día el problema del polvo fino: mientras trabajan se produce una gran cantidad de polvo muy fino que hace que el trabajo de los operadores se vuelva peligroso, aun cuando dispongan de equipos de protección individual.
Utilizar un aspirador industrial junto con a las máquinas de trabajo (como alisadoras o escarificadores) es la solución ideal para este problema, pero ¿cómo se elige un aspirador? La compañía Marwind hace algunas recomendaciones al respecto.
3 son las características que se deben considerar:
1. Tamaño y facilidad de transporte: el aspirador debe tener dimensiones contenidas para poder ser transportado en medios pequeños (como minivanes);
2. Filtración y sistemas de limpieza de los filtros: la eficacia y el sistema de limpieza del filtro son fundamentales dada la volatilidad del polvo;
3. Manejo y eliminación segura del material aspirado.
Para responder a estas necesidades, el fabricante italiano Delfin ha desarrollado soluciones de aspiración específicas para el sector del tratamiento de superficies gracias a la colaboración con los utilizadores finales del producto. La gama comprende:
- Aspiradores compactos fácilmente trasportables;
- Aspiradores con alta efectividad de filtración (hasta a 0,18 micrones para los filtros HEPA) y sistemas de limpieza automática de los filtros;
- Aspiradores y separadores equipados de sistemas de recogida segura Longopac, que permiten un retiro rápido y seguro del polvo aspirado.