Internacional. Investigadores del Hospital Universitario de Niza y del Institut hospitalo-universitaire (IHU) Méditerranée Infection de Marsella han realizado un estudio sobre la eficacia de los productos domésticos de limpieza que se venden y que sirven para acabar con las chinches. Han dado con uno, que además de ser natural, ayuda a combatir a estos insectos.
“Probamos varios tipos de polvos, como la arcilla verde, el bicarbonato de sodio, el talco, la tierra de diatomeas o la tierra de Sommières, y los resultados muestran que esta última puede matar las chinches en 24 horas”, ha explicado al medio galo AFP el parasitólogo y entomólogo médico de la Universidad de Niza, Pascal Delaunay, que se ha encargado de este estudio durante un año y medio junto a su compañsero Jean-Michel Berenger, miembro del IHU de Marsella y fundador del Instituto Nacional para el estudio y el control de las chinches (INELP).
“Además de un efecto a corto plazo, ya que una simple exposición de tres minutos es suficiente para matar las chinches, también hemos demostrado un efecto no repelente, a diferencia de los insecticidas químicos, y un efecto transversal, es decir, “una chinche contaminada también contamina a sus compañeros y los mata”, ha matizado Pascal Delaunay en sus declaraciones. El experto ha recomendado que, en caso de infestación, se esparza esta arcilla sobre los somieres, mientras utilizando los procesos habituales de limpieza de este insecto, incluido el lavado de la ropa a 60 grados.
Qué es la tierra de Sommières
Originaria de la región de Sommières en el sur de Francia, Terres de Sommières es un producto que se extrae directamente de canteras y se muele para conseguir una arcilla similar a la textura del talco. Se trata de un producto poco conocido en España, pero que es perfecto para aquellos que se decantan por realizar una limpieza basada en productos naturales.
Esta arcilla en polvo es utilizada comúnmente como absorbente en la limpieza de manchas en textiles que no pueden lavarse, como sofás, superficies, moqueta, asientos o tapicería; y en superficies porosas, como la madera o la piedra, ya que absorbe manchas líquidas de tipo graso procadas por aceite, mantequilla, cera, grasa, etc. También elimina olores y manchas como la orina de mascotas y bebés o el humo del tabaco. No deja aureolas en las manchas ni residuos una vez eliminado el exceso.
